Era temprano, dos personas se acercan a un portal de la calle San Juán de Ávila, de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Se disponen a tocar la puerta del bajo izquierda. Eran dos personas con semblante serio y muy ataviados con ropajes oscuros y muy clásicos.
Tocan al timbre y abres la puerta, te sorprendes, no sabes quienes son, aunque la cara de ella te es familiar:
- ¿Que desean?
- Hola, mi nombre es Damián, amigo de Yasmina - Tú haces un gesto de que no tienes ni idea de lo que pasa, pero tampoco quieres enterarte de lo que te quieren contar. Damián, con un gesto amable, te tranquiliza y te convence para que al menos lo escuches - ella no entiende el porqué de tu distanciamiento y nos dice que no le contestas al whatsapp, que la ultima vez que se vieron todo parecía ir bien entre ustedes, bueno, está triste por eso y no piensa en otra cosa que en hablar contigo.
- ¿Pero eso no me lo puede decir ella? Díganle que yo leo todo lo que llega a mi movil.
- Bueno, tu lo leerás, pero la impresión que le das es que no te importa lo que ella piense o te escriba. Además tiene cierto temor de perder un libro que ella te dejó, sabes que no es un libro como otro cualquiera.
- Si, lo sé y ya le he dicho que en cuanto pueda se lo devolveré.
- ¿Es que ya no la quieres? Todos tenemos nuestro lado malo e insoportable, pero ella es increíble.
Tu claramente no contestas a esa pregunta, cerrando los ojos, piensas en una forma para que esos intrusos, pesados y encima recordándote como puede ser una persona, se vayan te das media vuelta coges el libro y se lo das, (se lo puede meter por donde le quepa, piensas).
- Gracias, por darnos el libro, Yasmina escribió una carta, por si esto sucediera y te la entrego. Gracias por escucharnos y suerte.
Con un gesto en tu cara los despides y cierras la puerta.
No das crédito a lo que acaba de suceder, "como es posible que esta pesada y cobarde me manden a estos dos a hablar conmigo", no sabes si leer la carta o directamente tirarla a basura, no te puedes permitir mucho tiempo en pensarlo, tienes que ir a trabajar y esos dos personajes te ha atrasado.
Cuando vas a salir, miras el sobre de reojo y te lo llevas, lo dejas en la guantera de tu coche y decides dejarlo ahí de momento.
Al salir del trabajo, no sabes que hacer y le pides consejo a Xiomara,"¿Que hago? ¿La quemo y que le den o quizás hay algo que pueda interesarme?" quedas con Xiomara y las dos juntas en el coche dispones a abrir el sobre y leer su contenido, dice así:
Si estás leyendo esta carta es porque has decidido darle el libro a Damián y a Mónica, no me parece mal, pero tenía esperanzas en verte.
No se a que se debe tu distanciamiento, dices que no es por mi, pero no me dejas apoyarte en lo que te haya sucedido o lo que te esté sucediendo.
Me duele no poder pensar en un futuro contigo, porque una vez me dijiste que te veías viviendo conmigo y desde entonces esa fue una de mis ilusiones, fantaseábamos juntas sobre ello y aunque tenías miedo, creo que lo estábamos superando y sí, digo que lo estábamos superando, porque también era mi miedo, miedo a que me rechaces, miedo a no perdonarme, miedo a no quererme y miedo a mostrarme tal y como soy.
Quería hacer sacrificios y estaba segura de que nuestra historia saldría adelante, pero algo sucedió, no me hiciste partícipe de ello, pero quisiera oír de ti, si quieres verme y hablarme, que es lo que sucede. No creo que pueda ayudarte mucho, pero te apoyaré en todo lo que decidas, te escucharé cada vez que necesites desahogarte y estaré ahí cada vez que lo necesites.
Se que no soy necesaria para ti, tienes unas amigas estupendas que están para ti, una familia que te necesita y tu te desvives por ellos, quizá sea un estorbo en tu vida o una distracción, pero nunca quise serlo.
Con esto me despido y si por alguna razón te han dicho que estoy enferma, es mentira, solo estoy triste y desencajada en todo lo que ha sucedido. Besos
Reaccionaste de una manera sutil ante Xiomara, no entiendes el porqué de tanto palabrerío, pero lo que no sabes es que ella cree que alguna vez te gustó como escribe y con eso quiere acercarse un poco, si la dejas, a ti.
Bonito relato. Creo que le gustan mas cosas aparte de la escritura. Para acercarse a ella hace falta saber primero que le pasa y después se podría hacer algo.
ResponderEliminarSaludos guapa,
Letritas.
Pero como ella no quiere contarlo, no lo sabré nunca.
ResponderEliminarBesos Letritas, gracias por comentar.
Ahora tendrías que mandar a Damian y a Mónica un poco más lejos porque ya no vive en San Juan de Avila. Y te aconsejaría que no te des el lujo de predecir sus pensamientos cuando dices "como es posible que esta pesada y cobarde me manden a estos dos a hablar conmigo".
ResponderEliminarBueno, al fin y al cabo es un relato, todo está inventado y basado en una suposición.
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